Rosario es un polo cultural y de belleza que respira arte y sed de conocimiento parecería que en cada persona está latente el amor al arte y el conocimiento. En esta ciudad encontrè caminos, aperturas a la intervención artística cualquiera fuera, cuna de Guevaras, Olmedos, Fontanarrosas, Páez, etc.
Los cuentos de la Buena Pipa banda de los dos Bonfattis que no viven en mi casa rosarina, es una propuesta que según un seguidor se podría definir como la mezcla de Freddie Mercury y Mafalda. Performáticas psicodelias, mujer que da a luz a un Buda, marionetas salidas de carnavales mejicanos, gente danzando en paños. Por motus propio tocaron en la cana de Rosario.
Me enamorè de Rosario en esta oportunidad comenzando por la casa que me hospedó como hermano, hijo y nieto. Comencé a meditar venir a esta casa cuando el Pj me mostrò este videíto donde la gran Edelmira, artista y cantora de todas las horas, que en mi estadía me deleito con varios tangos y polcas, hace un papel actoral de máximo nivel, es simplemente imperdible, la mejor invitación que he visto en mi vida.
El Colo en una charla trasnochada en el hostel en el que labura, mientras charlabamos dibujaba algo que le parecía gracioso que le llamara macacos. Es su amansa loco, para calmar la ansiedad de estar quieto, casi sin mirar iba haciendo imágenes que se relacionaban con la charla de alguna manera. Le pregunté si me regalaba alguno, y me dijo que me los llevar todos, sino iban a la basura, cientos de estos nacen y mueren en una noche de laburo.
En un momento iba por un puente sobre el cual se ve el Paraná hidra de cien brazos, uno atrás del otro con islas en el medio, cantaba Mateo y yo cantaba con él, paso por al lado de un hombre de bastón y dificultad para caminar, -cantando Mateo con un mate bajo el brazo, más uruguayo podés ser?- Jorge se presenta como Jorge. Periodista de una instrucción asombrosa, maneja una interesante intersección entre las más novedosas teorías del campo científico y el resabio de sabidurías filosóficas teológicas milenarias. Tiene hemofilia, por eso vive en Rosario, porque su remedio sale como dos lucas v, precisamente por esta razón recurría en Baires al mercado negro de medicinas. Allí los fabrican sin ningún tipo de regulación, no tienen controles, así que un tiempo atrás una dosis para vivir en mal estado, o mal diseñado, lo tuvo al borde de la muerte y le dejó las visibles secuelas, sabe que producir cada uno de esos medicamentos cuesta 25 dólares, habla de las patentes de medicamentos como un negocio muy turbio . Mundo en una persona o Jorge, iba a una charla de Leonardo Boff sobre la realidad del agua y sus perspectivas, en el colorido anfiteatro semicircular del Centro Cultural España. Los primeros minutos habló el perfecto presentador de una protocolar cena de cubiertos de plata, un hombre de cerámica que no paró de inflar a los participantes y hablar de títulos honoríficos que se le iban a entregar a Boff. Luego salío el rector a hablar de la universidad y lo honrada que estaba ésta de un ilustre bla bla bla….saraseando en su propio favor. De pronto irrumpe una masa de activistas versus el Rector con cánticos de estadio, cantándole al impecablemente trajeado de pecho inflado, que seguía habando como si hubiera un silencio funebre bajo su voz, sonrío, parte del público pide silencio. Luego de un rato convencen a la turba animadora que arranque, el último en irse le grita –Ladrón-.
El pacífico teósofo Boff, arranca su charla celebrando la democracia, y surge un espontáneo aplauso democrático. La charla aportó posibles aperturas al tratamiento del agua y como combatir los abusos de las empresas privadas al patrimonio de vida de líquido vital. También conocí a un señor de prominente barba blanca con más poderes que Gandalf maestro en danzas circulares, que me invitó a pasar por el planetario al otro día para participar en el círculo danzante. Nace esta espiritual disciplina de una agrupación de danzas que se bailaban en círculo alrededor del mundo. En el planetario al día siguiente bairlamos de Grecia, Macedonia, Kenia con sus respectivas músicas. Allí después de transitar ese baño de paz corporal, nos fuimos con Jorgelina una maestra y payasa de Venado Tuerto (gran nombre de ciudad) creadora de una Fábrica de sueños y Jorge que nuevamente aparecía en escena, tomamos un café con leche y contamos nuestro momentos actuales, nuestras dudas existenciales al día de hoy, como si la voz fluyendo como el mar y transitando caminos inesperados se transformara en nuevo recorrido, así fue a corazón abierto, nos sentimos plenos de compartirnos, nuestra payasa se subió a una fuente y nos contó un cuento, recité una poesía, hablamos del sonido y como curar con él.
En casa Bonfatti cada noche fue de guitarreada, cantos y danzas, el Lucho descubriendo la pasión por la murga uruguaya guitarreándola, toqué Mi Semilla varias veces, única canción que me atrevo a cantar y tocar con la viola aunque suene a perro pulgoso, vengo en visible mejora con eso. También hice un Strogonoff, el domingo al mediodía, luego mostré el avance del documental que estamos llevando adelante con Caíto a Marita madre, que organiza un festival de cine anciano en abril, y estamos todos invitados. Hasta la próxima entrega.