jueves, 22 de setiembre de 2011

Espiral

Vuelvo a pisar este territorio virtual luego de dejarlo suelto en el ciberespacio sideral. Esta es un instancia de empezar a plasmar todas las líricas o ideas que van surgiendo. Es un tiempo muy prolífico a nivel de escritura, intentando generar un impulso que trascienda la cotidianeidad que me achata a veces. 

Este año ha sido un remolino marino, han surgido cambios trascendentes en mi vida, quiero creer que estoy en el camino de la iluminación, aunque pase por territorios sombríos. La idea es vivir los claroscuros con honestidad para conmigo mismo primero, que es la forma de ser honesto con el mundo. Aunque me duela la destrucción, a veces es el camino que abre paso a la construcción. Espero que podamos nacer nuevamente en cada luna nueva, para alcanzar nuestra plenitud de luna llena, espero que estemos cerca siempre sin miedo, desde el coraje  necesario para ser libre. 

Esta imagen fue de una tarde invernal de algún año, frente al mar montevideano.



Tengo suerte de aun verte
al circular el tiempo
no tiemblan los círculos
solo fluyen en paz

como hombre no tengo doble
tengo doblez reverso y mi piel
hoy desperté en una torre
donde el sol trajo su espíritu blanco

como hombre fui roble cobre corte
llenando de palabras un mundo ahogado en palabras
ciudades sin silencio, donde la amistad y el amor
nos salvan de la maquinaria gris de la ambición inconsciente

que se siente estar al borde del abismo siempre
forzando equilibrio viviendo siempre en tensión
cargando libros de memoria sin emoción

Porque no caer?



   si todo es circular                 abajo y arriba
gravedad                   y                       perspectiva
   en la misma                                vida

      pasado y futuro somos nosotros
      no existe otro
      como hombre como hombre
      asimilo lo perdido
      cago lo no mío

vuelvo a ser río
corre
vivo

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Estimado Pebete,

Bienvenido por estos lares donde hace tiempo se lo extrañaba. Se agradecen los versos dejados con sinceridad y franqueza sin tregua hacia uno mismo.

Le deseo en su búsqueda, que por cierto y en distintas formas es la de cada uno de nosotros, un buen caminar. Que la búsqueda sea en si misma el ejercicio del encuentro.

Por aquí lo esperaremos, en este espacio virtual donde nuestras manos escriben palabras de otros yos...donde leemos y buscamos claves de aquellas rimas que en otros tiempos construían nuestra alegría y que a veces olvidamos en el "cajón de los juguetes".

Le doy la bienvenida y por aquí lo espero...le pido disculpas si las palabras no entregan coherencia. Y es que como le dije...por aquí las manos escriban palabras de otros.

Un gran abrazo,
R

Pebete Ormaechea dijo...

Querido Rodri, siempre es un placer encontrarlo por aquí y el ejercicio de aventurarse en el territorio de las palabras, se completa gracias a quién la recoge y las reinventa, es la idea del círculo del que hablamos.

Que linda imagen la del cajón de los juguetes, donde había desde soldaditos, autitos, artículos diminutos de dudosa utilidad, pero uno siempre tenía la ilusión de que hubiera algún juguete desconocido que hubiera pasado por nuestras manos en un descuido y el recuerdo no lo hubiera capturado antes de entrar en la caja de pandora de los juguetes.

Celebremos que nuestros otros siempre se encuentren, a mi me sucede que cuando suelto la letra en el papel ya no me pertenece, es como si al expulsar y pasar la barrera de la piel, comienza a pertenecer a la ilusión del afuera.

Por lo pronto le digo que lo que quería decir arriba, es que cartearme con usted de esta manera para mi vale todo este blog. Conservo la ilusión de la época de los manuscritos, hace un tiempo comencé a escribirte una carta a mano y nunca la terminé, pero creo que de una manera aquí se refleja ese diálogo hermoso que posibilitaba la hoja escrita por una pluma en la noche, imagino que la mayoría se escribían de noche. Que acontecimiento sería recibir una carta de puño y letra, quiero creer que el alma de esa comunicación todavía sobrevive.

Abrazo enorme
Man

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