Vengo de leer a Bolaño, sus cuentos casi que me obligaron a escribir estas pequeñas crónicas de un viajero que cree haber recorrido tantos mares y navega en sus sueños los paraísos que otro/as celebraron antes.
Esteban me dejó en la estación de la ruta 1, una Ancap, único recuerdo a resaltar el extrañar la guitarra y que eso se viera exaltado por el estuche vacío destinado a ser el hogar de una viola nueva que iba a adquirir, dentro de este llevé un gorro de yute, una almohada y la armónica Honher Seductora que pasara por varias generaciones de mi familia.
Agarré varios dedos y llegué hasta Young, comí empanadas de carne en una panadería, dos, recuerdo que eran baratas y sabrosas, hechas con dedicación, también me convidaron un vaso de agua mineral fría, que dada la alta temperatura y la carga llevada por varias cuadras revitalizaron al protagonista.
En Paysandú llegué a lo de mi tío el Toby Ormaechea, el calor era aplastante como todos los dìas que seguirían hasta ayer y hoy. Miramos Misión imposible 4 junto a Martín y Maca, con colores saturados, con el sonido raro y los subtítulos ausentes, me dieron ganas de hacer kung fu, tal vez este año incursione. Este es un año dragón y lo voy a dedicar a artes milenarias chinas. Luego compartimos con el Toby unos chifles, Chivas morocho, charlamos entre otras cosas sobre el libro Cazadores de Microbios, el cual habla de todos los entretelones en la investigación de las enfermedades y sus curas, los entretelones de la vida de gente como Koch, Pasteur y otros animales científicos, recuerdo como pintorezcas las escenas y me dieron ganas de leerlo.
Al otro día en la tarde luego de innumerables dedos estaba en Rosario en la casa de los Bonfatti, el Colo estaba con la pequeña Lupe, salimos a caminar con el mate mientras el sol caía llenando de rosas y violetas la parte baja del telón del cielo, caminamos por la vía de un tren que ya no existía más, o no se movía más que es lo mismo que no existir para los diseños hechos con ese fin, en el cual también nos encontramos los seres humanos, los cometas y las golondrinas entre otros. Charlamos sobre el desaparecido Oesterheld creador de la mítica saga el Eternauta, colonizador éste de miles de paredes, símbolo de la lucha eterna por la construcción de la memoria, de como Herge el creador de Tintin habìa escrito una carta al presidente Argentino pidiendo su liberación.
Luego nos bañamos en una bañera que hay en el patio, que funciona como piscina . Me llevaré la idea para nuestra linda casita en el Palermo.
Siempre creo que si tuviera la misma mirada de viajero en montevideo podría escribir asiduamente y reconstruírme continuamente, en base a sorprenderme con los pequeños detalles, así como Proust hiciera una obra maestra de una vida quieta y monótona, dándole una mirada profunda como la del águila paciente a recuerdos que otro juzgaría insignificante.
Anduve mucho en bicicleta en Rosario, encontrarme un montón de amigos se tradujo en caná, fernet y guitarra, bicicleteé mucho de noche y día, conocí a la masa crítica a través de un amigo del Colo que iba para una reunión de ellos, gente que aboga a favor de la bicicleta como medio de tránsito por la vida, se juntan en un lugar y salen sin un destino aparente, miles de bicicleteros, familias enteras. Como verán me emocionó la idea y me uniré en Montevideo a esta corriente de alegres bicicleteros.
La casa del Colo es una casa que debe haber sido hecha por la década del 30,y que pegada tiene una casa gemela abandonada invadida por la vegetación y con las vigas a la vista en muchos lugares. Me quedé en el cuarto del Paila que es su atellier de pintura (ver ajoba la pintura del mostro) aunque no duerme mucho ahí, fueron días de mucha música y hasta un ensayo de la buena pipa presencié, la pipa con el tabaco de la creación (http://www.myspace.com/loscuentosdelabuenapipa). Mientras charlábamos como siempre el Colo dibujaba sus macacos (más ajoba, http://grisaguero.blogspot.com/). También se compartió con el grillo (ficha important), con el Charly marionetas, entre otros valores.
Pasaron varias barajas por la casa, entre ellas el Fer, un ser mutante de nariz insaciable que había sido plomo de los Redondos por cinco años, las cicatrices en su cuerpo lo confirmaba, las había de balas y de puñales. "No sabés lo que era eso, no tenés idea, nos despertábamos un jueves al mediodía y nos acostábamos el martes de noche", "esos años no los cambio por nada pero me cagaron la vida", resumía su vida y su situación existencial con una frase que repitió muchas veces "me caí al piso y le erre, sabés lo que es eso? Me caí al piso y le erré"
Antonio Bonfatti o "pelado" el padre de todos los Bonfatti o sea Lucho, Leo, Paila y Colo, es el gobernador de Santa Fe, se organizó un asadón en su casa el domingo al mediodía al que le dimos con fuerza, provoleta, matambrito, tira, ensaladas varias. A su vez con la Marita madre de la gurisada y el Lucho nos comimos unos chori y unas verduras al horno, buen descubrimiento es la berenjena entera al horno queda de puta madre.
Noche no metí mucha ya que llegué un sábado y estaba media mortadela, salí igual pero estaba tranquila la noche, el domingo de noche llegó el Leo nos tomamos unas copas, entre el embale y la charleta nostalgiosa se nos fue la noche, voy a pasar por la revancha.
Sigue en breve...
4 comentarios:
si pbt...si pbtito...
Grande Bebi sigue ascendiendo!
que grande pebe
Muy linda y pintoresca historia!!!!
y una frase monumental :"esos años no los cambio por nada, pero me cagaron la vida"
Abrazo fuerte y aunque no creas siempre te tengo muy presente.
Para el verano 2013 playawar explota!!!
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